A raíz del primer accidente mortal ocasionado por un patinete eléctrico, la DGT se ve obligada a regular el uso de los vehículos de movilidad personal (VMP). Ya están trabajando en la nueva normativa y han adelantado que la velocidad máxima para estos vehículos se reducirá a 25 km/h. Además, no podrán seguir circulando por la acera y los usuarios deberán de someterse a controles de alcoholemia al igual que cualquier conductor de coche o moto. “Este caso pone en evidencia que es muy urgente y necesario que se haga algo que los patinetes salgan de las aceras. Si la DGT lo regula será magnífico, porque ahora mismo tenemos un inmenso vacío”, declaró la alcaldesa de Esplugues, localidad donde sucedió el accidente.
Tráfico quiere elaborar una normativa básica para que luego sea ampliada por los ayuntamientos, que son los encargados de legislar este tipo de vehículos. También pide que la Policía Local esté más atenta a la circulación de estos vehículos para poder asegurar el bienestar de los ciudadanos.