Muchos expertos coinciden en que el hidrógeno es el combustible alternativo mas eficiente para los vehículos del futuro. Se trata de una energía totalmente renovable que respeta con creces al medio ambiente. Hoy en día disfrutamos en España de vehículos que ya dotan de este tipo de combustibles.
Los coches impulsados por hidrógeno funcionan almacenando “H2” en la pila de combustible. Posteriormente se inyecta oxígeno creando una reacción que genera electricidad y vapor de agua al mismo tiempo. La electricidad produce la potencia necesaria del motor para funcionar adecuadamente y el vapor de agua se elimina por el tubo de escape, con un oxígeno más puro que el que había absorbido el vehículo al principio.
De esta manera, el vehículo no solo no contamina, sino que purifica el aire. Además, estos coches son capaces de reducir notablemente el tiempo de repostaje. “El hidrógeno se parece a la electricidad, en el sentido de que se puede almacenar, pero resulta mucho más versátil”, comenta Miguel Peña, secretario de la Asociación Española del Hidrógeno. “El mejor balance se obtiene al producir hidrógeno a partir del agua con energías renovables [eólica, solar…]. La idea es generarlo en épocas de excedentes, almacenarlo y utilizarlo después, cuando las condiciones sean desfavorables y solo permitan una producción mínima”.
El desafío en la propagación de este tipo de vehículos está en que dispongamos de una infraestructura de recarga óptima a lo largo de todo el territorio, y unos precios razonables que no estén al alcance de muy pocos.
Javier Navarro